Aunque no hay un momento “exacto” para que la adolescente se realice su primer examen pélvico (tacto vaginal), el Colegio Americano de Obstétras y Ginecólogos recomienda que las adolescentes acudan al médico para su examen ginecológico – incluidas las pruebas de Papanicolau – durante los primeros 3 años después de haber tenido sexo vaginal por primera vez.
La adolescencia es un período de la vida marcado por rápidos cambios físicos y psicológicos.
Muchas adolescentes se encuentran más vulnerables hacia conductas impulsivas y de riesgo para su salud como beber, fumar, trastornos de la alimentación, consumo de drogas y sexo sin protección.
Es fundamental que todo adolescente reciba información clara y confiable en sus familias y colegios con relación a prevención de enfermedades de transmisión sexual y embarazos no deseados.
Sin embargo, la educación sexual es algo que debe iniciarse en el núcleo familiar durante la infancia y constituye parte de la formación integral de todo ser humano.
¿Cuándo realizar el examen ginecológico?
El primer examen no se realiza apenas la adolescente ha iniciado su vida sexual. Debe esperar 3 años después del primer contacto sexual vaginal.
Las consultas médicas se enfocarán en proporcionar información y educación sexual: cambios corporales, métodos anticonceptivos, autoexploración de senos, prevención y detección de enfermedades de transmisión sexual (ETS), vacunas, etc.
Si la adolescente no es sexualmente activa, un médico no indicará que se le efectúe un exámen pélvico, que consiste en la exploración ginecológica interna a través de la vagina.
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Sin embargo, si la joven ha iniciado su vida sexual – en especial, si tiene menos de 15 años – pasa a formar parte del sector de la población con mayor probabilidades de adquirir alguna enfermedad de transmisión sexual (ETS).
Condiciones de salud que exigen un examen pélvico
Un médico ordena la realización de un examen pélvico cuando la adolescente experimenta cualquiera de las siguientes condiciones de salud:
- Secreción vaginal de apariencia anormal
- Ausencia de menstruación (amenorrea)
- Sangrado excesivo durante la mentruación (menorragia)
- Dolor pélvico
- Embarazo
- Síntomas de enfermedad inflamatoria pélvica (EIP)
- Sospecha de abuso sexual o violación
- Dolor abdominal de origen desconocido
- Dolor y/o urgencia para orinar de origen desconocido
- Expectativas y temores de las adolescentes
Un estudio realizado en el Reino Unido y en Dinamarca analizó cómo había sido el primer examen pélvico para las jóvenes que participaron.
Los resultados hallados indican que a medida que la joven avanza en edad más positiva es su percepción del examen. Los temores más grandes fueron el uso del espéculo – instrumento médico usado para abrir la abertura vaginal – y no ser capaz de detener el examen.
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También mostraron inquietud con relación al género del médico y un alto grado de vergüenza.
Sin embargo, después de haber experimentado su primer examen pélvico las jóvenes expresaron que había sido mejor de lo que esperaban.
Una buena comunicación entre el médico y la joven paciente ayudará a que esta primera experiencia sea positiva y la motivará a continuar acudiendo a su revisión periódica en beneficio de su salud sexual.
Fuentes: sexo.about.com